AMIGOS ARGENTINOS DEL ALMA ANDINA
Por: Pascual E. ALEJO RETTIZ
Dos ciudadanos argentinos cuyas cunas de su nacimiento es Buenos Aires, llegaron a la tierra Bella y Generosa de la Provincia de Ambo, según manifiestan son novios errantes de calles y rutas que a pie trajinan el Perú, llevando el buen gaucho su guitarra y una quena su amada compañera quien entona melodías propias del alma andina.
Majaderos en su forma de vestir quizás amparados en que el mundo es de todos los hombres y que en su filosofía dura del vivir esta continuar su rumbo hasta donde se acaban sus vidas. Apreciamos su gemir guitarrero y el sonido dulce de la explotación sufrida que no le derrota un pueblo y un país extraño, si en este lugar encuentra la paz y la bella alegría de todos los Ambinos que a cuestas seguimos adelante. Ahí no más recordamos aquellas jornadas de lucha por la independencia de nuestra América cuando colombianos, chilenos, argentinos trajinaron las faldas de los cerros de Yanahuanca, Angasmarca, Huacar, Ambo, San Rafael, etc, hasta llegar a la batalla de Junín. Es pues también un derecho nuestro de asistir al extranjero de aquellos países con el afecto y el calor de un pueblo que no olvida el sacrificio de sus otroras hombres que apoyaron para lograr la libertad americana.
No quisieron dar sus nombres, al que nosotros le saludamos con el verso siguiente: acaso ustedes son hijos del viento y su casa es el mundo, y el techo suyo son los cielos y todos son sus hermanos y amigos del alma; ambos hicieron un silencio y tristemente se tomaron de las manos, continuando su camino errante.
Mañana del viernes dos de octubre del 2009, se hizo un rato triste y luego salió el sol para alentar la nostálgica mañana de esta pareja de amigos argentinos. Que no sabemos ahora donde están y en que caminos o plazas seguirán entonando las melodías del alma andina.
Por: Pascual E. ALEJO RETTIZ
Dos ciudadanos argentinos cuyas cunas de su nacimiento es Buenos Aires, llegaron a la tierra Bella y Generosa de la Provincia de Ambo, según manifiestan son novios errantes de calles y rutas que a pie trajinan el Perú, llevando el buen gaucho su guitarra y una quena su amada compañera quien entona melodías propias del alma andina.
Majaderos en su forma de vestir quizás amparados en que el mundo es de todos los hombres y que en su filosofía dura del vivir esta continuar su rumbo hasta donde se acaban sus vidas. Apreciamos su gemir guitarrero y el sonido dulce de la explotación sufrida que no le derrota un pueblo y un país extraño, si en este lugar encuentra la paz y la bella alegría de todos los Ambinos que a cuestas seguimos adelante. Ahí no más recordamos aquellas jornadas de lucha por la independencia de nuestra América cuando colombianos, chilenos, argentinos trajinaron las faldas de los cerros de Yanahuanca, Angasmarca, Huacar, Ambo, San Rafael, etc, hasta llegar a la batalla de Junín. Es pues también un derecho nuestro de asistir al extranjero de aquellos países con el afecto y el calor de un pueblo que no olvida el sacrificio de sus otroras hombres que apoyaron para lograr la libertad americana.
No quisieron dar sus nombres, al que nosotros le saludamos con el verso siguiente: acaso ustedes son hijos del viento y su casa es el mundo, y el techo suyo son los cielos y todos son sus hermanos y amigos del alma; ambos hicieron un silencio y tristemente se tomaron de las manos, continuando su camino errante.
Mañana del viernes dos de octubre del 2009, se hizo un rato triste y luego salió el sol para alentar la nostálgica mañana de esta pareja de amigos argentinos. Que no sabemos ahora donde están y en que caminos o plazas seguirán entonando las melodías del alma andina.
